Fundación Eléutera participó en la inauguración del primer centro de reinserción social en Honduras
Este jueves 31 de mayo en San Pedro Sula se realizó la inauguración del Centro para Formación, Capacitación y Sgeuimiento de exprivados de libertad, mismo que es el primer centro enfocado en la reinserción social en Honduras. Dicho proyecto es financiado por la Iglesia Católica y la Organización Internacional de Derechos para el Desarrollo (IDLO por sus siglas en inglés).
Con esta inauguración se pone final a una campaña iniciada en abril con la exposición de murales elaborados en tres distintos centros penales y con la posterior fase de la campaña que se desarrollo con la Feria de Exposición de Habilidades y Servicios con el objetivo de fortalecer y exponer las destrezas que los exprivados de libertad han obtenido dentro de los talleres y programa de reinserción promovido por la Pastoral Penitenciaria.
Exprivados de libertad recibieron su certificado por completar curso de trabajo en madera por parte del Infop.
Durante el 2018, Fundación Eléutera ha trabajado muy de cerca con la Pastoral Penitenciaria apoyando la reinserción social de exprivados de libertad por medio de la constitución de sus empresas y así lograr un retorno efectivo a la vida económica del país, sin verse impedidos de hacerlo por un record penal que les sirva de obstáculo laborar en la empresa privada.
De esta manera, Eléutera reafirma su compromiso con los derechos de esta población vulnerable y a su vez con la disminución de la violencia al apoyar los programas que se desarrollan en este espacio de reinserción para todos aquellos que buscan una segunda oportunidad y así rehacer sus vidas.
Celebramos que Honduras se esté abriendo a este tipo de iniciativas que necesitan del apoyo firme de la sociedad hondureña que reclama seguridad e igualdad de oportunidades.
Written by Elena Toledo
Related View More
Porqué cambié la caridad por las políticas públicas
Las políticas públicas pueden mejorar vidas, o terminar con ellas
Dictadura de las modas: Lenguaje… ¿incluyente?
No es el plástico, es el individuo